La Dirección Nacional de Aduanas reforzó los puestos de control fronterizos en Paysandú y Fray Bentos para atender el mayor flujo de ingreso y egreso de turistas durante la temporada estival, en particular durante los tradicionales períodos de recambio quincenal de veraneantes.
Por ejemplo, a principios de febrero, para facilitar la llegada de vehículos a través del puente internacional Gral. Artigas, en Paysandú, fueron habilitados hasta cinco carriles de ingreso, mientras que en el puente internacional Gral. San Martín, en Fray Bentos, se habilitaron tres casetas de entrada y una de salida.
Mientras tanto, al final de la segunda quincena de enero se habilitaron en el puente de Fray Bentos hasta nueve sendas para el ingreso al país y hasta cuatro para el egreso, con una dotación de siete funcionarios. Se registraron colas en la cabecera argentina y se produjeron algunas demoras en los trámites migratorios.
A su vez, en el mismo período, en el puente de Paysandú se registró un importante flujo turístico en ambos sentidos, con predominancia en la salida de viajeros. Por esa razón, se dispusieron hasta seis carriles de entrada y hasta tres de salida y sólo se registraron colas en esta última.
Para evitar que se produjeran atascos y atrasos significativos en la circulación, la DNA aplicó el máximo de flexibilización posible en los controles, sobre todo a los turistas que debían abandonar el país.
Por su parte, al concluir la primera quincena de enero se registró una situación similar, con un aumento del tránsito y filas de vehículos, tanto en la entrada como la salida al país, en algunas horas pico, en especial entre las 10 y las 18, sobre todo en el puente Gral. Artigas.