El 17 de julio de 2014 los Directores de Aduana de Brasil y Uruguay firmaron el Proyecto de Programa Piloto de Seguridad Aduanera en la Cadena de Suministro Brasil - Uruguay. Mediante este acuerdo, las aduanas se comprometen a conceder un tratamiento diferenciado a los operadores que se habiliten ofreciendo agilización y simplificación de procedimientos aduaneros.
El evento contó con la presencia de autoridades nacionales e internacionales de destacada relevancia como el Dr. Kunio Mikuriya, Secretario General de la Organización Mundial de Aduanas; Cr. Enrique Canon, Director Nacional de Aduanas del Uruguay; Ernani Argolo Checcucci Filho, Sub Secretario de Aduanas y Relaciones Internacionales de la Receita Federal de Brasil; Ec. Luis Porto, Ministro Interino del Ministerio de Relaciones Exteriores; Joao Carlos De Souza, Embajador de Brasil en Uruguay, y operadores del comercio exterior de Uruguay y Brasil, además de funcionarios de la Dirección Nacional de Aduanas.
Considerando los avances del programa Operador Económico Autorizado (OEA) de Brasil y Uruguay, y la experiencia brasilera en el programa denominado “Linha Azul”, los Directores Generales de ambos países acordaron que las aduanas poseen madurez para la implementación inmediata de un Programa Piloto de Seguridad Aduanera en la Cadena de Suministro de Bienes.
Entre otros objetivos, este programa busca la simplificación y agilización de controles y procedimientos en los pasos de frontera tomando en cuenta elementos de seguridad del comercio legítimo y garantizando el cumplimiento de la legislación aduanera.
El objetivo del mismo es el futuro reconocimiento mutuo, es decir, el programa debe garantizar un elevado nivel de seguridad aduanera en toda la cadena de suministro de bienes, desde la exportación de la mercadería partiendo del territorio aduanero de uno de los dos países, hasta su importación por el otro país.
Por lo tanto, las aduanas se comprometen a conceder un tratamiento diferenciado a los operadores que se habiliten, ofreciendo agilización y simplificación de procedimientos siempre que se cumplan con los requisitos establecidos. Los procesos de validación de las empresas participantes serán de responsabilidad de cada administración aduanera en relación a los operadores establecidos en sus respectivos países, y el principio adoptado será el de la confianza mutua.
Una vez asegurado el cumplimiento de las obligaciones por parte de los operadores involucrados en el Programa, las aduanas podrán dedicar mayor atención a los operadores de elevado riesgo aduanero, lo que traerá una mayor eficiencia a las administraciones aduaneras de Brasil y Uruguay.
